LA ESPERANZA

La esperanza es el sentimiento que uno tiene cuando desea algo con mucha fuerza, pero a veces ese deseo parece imposible e inalcanzable, entonces pierdes la esperanza. Es un sentimiento dirigido a cualquier cosa, es un sentimiento que a veces provoca tristeza.

Todo el mundo tiene esperanza hacia alguna cosa, ya sea una meta, un plan para el futuro, un deseo que te gustaría que se cumpliese, etc. Basándonos en estos tres ejemplos podemos decir que tener una meta es muy importante para muchísima gente, ya que les proporciona seguridad en sí mismos y también confianza si logran llegar al final. Una meta es una proposición que te haces a ti mismo para saber si puedes alcanzar tal nivel de dificultad, una meta puede ser llegar a hacer una cosa que antes no podías, puede ser proponerte sacar buenas notas en el colegio, etc. En el caso del plan de futuro es diferente, ya que creo que tenerlo es importante para saber ya directamente si cuando acabas los estudios obligatorios quieres hacer algo o no. También es bueno porqué si decides continuar estudiando, tener un plan de futuro te ayudará a saber mejor a que te quieres dedicar. Para mí tener uno, no es saber a mi edad con exactitud, a lo que me quiero dedicar profesionalmente, sino más o menos tener una orientación de lo que me gustaría hacer y lo que no, así ir directamente al grano. Y ya por último podríamos decir que un deseo también lo tenemos o hemos tenido todos. Hay deseos de muchos tipos: llegar a ser profesional en un deporte, ser rico, casarte con alguien famoso, llegar a ser cantante o actor, etc. Todo son sueños que se pueden llegar a cumplir o no, pero en cualquier de los dos casos sabemos que todos ponemos toda nuestra fe en ellos, y que un deseo es una cosa, “atracción”, que nos hace soñar y sentir bien. Por eso todos lo necesitamos.

En los tres casos podemos ver que siempre nos referimos a la esperanza hacia alguna cosa o alguien. Todos necesitamos tener esperanza en algo que nos guste, porque la esperanza es una de las cosas que nos hace ser personas y tener un carácter propio. Y si algún día perdemos la esperanza en algo nos ponemos tristes, pero después encontramos otro deseo, otra meta, otro plan de futuro y vuelves a creer en ti mismo.